Los avances de Internet no tienen límites. Cuando ya creíamos que lo teníamos todo con la versión 2.0 de la gran red de redes, de a poco se están dando a conocer indicios de lo que será la nueva web 3.0.
A esta versión algunos le llaman la gran revolución de Internet, ya que vendrá a cambiar la eficiencia y el control de nuestros datos.
¿Pero de qué se trata la web3?
Si bien aún están en proceso de investigación y construcción, la web3 se ha acelerado debido al metaverso.
Para comprender de qué se trata esta nueva versión de internet, es preciso remontarse a su evolución desde su origen en las décadas del 60 y 70, cuando su objetivo era solo transferir información debido a su carácter gubernamental.
En los 90, la Web 1.0 se basaba en hipervínculos con sitios como Yahoo, que eran básicamente páginas web estáticas que te llevaban a otros sitios.
Ya en los 2000 la Web 2.0 modificó todos los esquemas al permitir que los mismos usuarios pudieran comunicarse entre sí a través de las diversas plataformas web y Redes Sociales, modificando la estructura tradicional de comunicación vertical por una manera horizontal y más interactiva y participativa.
Siguiendo esta evolución de Internet, lo que se prevé para la web 3.0 es que será más abierta, más rápida, más segura y resistente a los ataques, lo que generaría mayor confianza en los usuarios en cuanto a la utilización de sus datos; debido a que serán ellos quienes podrán elegir quién y cómo guardará su información.
Según Úrsula O’Kuinghttons, directora de Comunicación de Parity Technologies, empresa especialista en blockchain, «Lo que se quiere lograr con la Web3 es volver a la esencia de lo que fue Internet. Es decir, intentar que nadie controle esta herramienta de comunicación tan presente en nuestro día a día».
Por consiguiente, uno de los principales valores de esta nueva versión de Internet sería la descentralización: al ser una red más equitativa, le restaría poder a las grande compañías de internet como Google y Facebook.
Tecnología blockchain para la web 3.0
Una parte clave de la Web3 es la tecnología blockchain que, al ser una gran base de datos presente en todo el planeta, permite crear «bloques» y formar cadenas de datos gracias a dicha característica.
Esta nueva tecnología la conocemos gracias a las criptomonedas: el término fue acuñado en 2014 por Gavin Wood, cofundador de la criptomoneda Ethereum.
Etherum es el segundo protocolo de blockchain más usado del mundo y los cimientos de la Web3 están basados en esta tecnología.
Seguridad, rapidez y más poder a los usuarios
En esta nueva era de Internet todo será mucho más rápido y personalizable debido a que ya no se necesitarán grandes discos duros para almacenar información: todo estará en la nube.
De esta manera, la Web3 permitirá a las máquinas interpretar un volumen mucho mayor de datos, estableciendo una interacción más profunda entre los usuarios de las distintas plataformas.
Un punto fundamental de la versión 3.0 de Internet es que los contenidos creados se podrán identificar desde su origen, lo que permitirá constatar su veracidad, todo gracias a esta gran base de datos conectada a todo el mundo.
Respecto a la seguridad de la tecnología blockchain en esta nueva versión de Internet, Úrsula O’Kuinghttons explica que es muy segura y que «de momento, en más de 10 años, nadie ha sido capaz de hackearla».
«El tema de la seguridad es crucial en la era que vivimos porque nuestras vidas y nuestros datos están cada vez más volcados en Internet», puntualiza O’Kuinghttons.
Se espera que estos cambios, que avanzan a paso lento pero seguro, otorguen más poder a los usuarios sobre los datos que comparten y acceden, generando una Internet más igualitaria y libre. Lo que muchos creen que podría terminar con la hegemonía de datos de los gigantes de Internet.