La pandemia fue un factor importante para el surgimiento del trabajo remoto, como también de nuevas tecnologías que han propiciado nuevas maneras de relacionarnos a través de las plataformas digitales.
Hace unos días viajé en tren a otra ciudad. A mi lado estaba sentada una madre con su hijo pequeño que no paraba de llorar, hasta que la mujer le pasó su celular y el niño se sumergió silencioso (hasta el final del viaje) en ese pequeño mundo virtual de entretención.
De inmediato se me vino a la mente el Metaverso, la nueva plataforma que Mark Zuckerberg –fundador y CEO de Facebook- está trabajando a toda prisa para insertarnos en la realidad virtual.
Si bien Zuckerbeg es quien quiere posicionarse como el pionero de esta nueva realidad, Google, Nvidia y Microsoft ya están apostando sus fichas para crear sus propios Metaversos.
Mucho se habla del Metaverso, pero ¿de qué se trata?
Quizás los y las amantes de la literatura y el cine de ciencia ficción ya están al tanto del concepto gracias a películas como Ready Player One o Los Sustitutos, donde las personas podían llevar sus vidas paralelas a la realidad física a través de la tecnología o de videojuegos.
Ya en 1992, con la novela Snow Crash, se comenzó a utilizar el término Metaverso para hablar de espacios de trabajo virtuales muy parecidos a lo que conocemos como la vida real.
Porque la idea del Metaverso es ésa: hacer del espacio virtual conectado a través de dispositivos ultra tecnológicos, como lentes de realidad virtual o sensores sensibles al tacto o incluso a las emociones, nuestra nueva manera de relacionarnos con otros; aunque en este caso, con avatares o personajes creados a nuestro antojo desde un computador sin movernos de nuestra casa.
Universo paralelo: ¿nuevas oportunidades?
Hay quienes ven al Metaverso como un nuevo mundo de posibilidades, considerando que la realidad muchas veces se nos hace difícil de manejar dadas las circunstancias externas.
Pero es en el ámbito de los negocios donde Facebook, ahora Meta, está apostando para llamar la atención de los y las emprendedores.
Porque el Metaverso podría tener sus propios tiendas virtuales con aplicaciones prácticas que permitieran atender o hasta tener reuniones de trabajo, en la que todos compartan una oficina digital conectándose desde sus casas.
Un Metaverso también podría tener su propia economía a través de monedas virtuales, que ya están operativas en casi todo el mundo, pudiendo generar intercambio en el ámbito de la oferta y demanda con los distintos productos y servicios disponibles en la web.
Pese a lo llamativo de esta nueva apuesta, aún hay mucho paño por cortar ya que no están todas las condiciones tecnológicas ni de infraestructura de diseño para poder sumergirnos en esta nueva realidad.
Como tampoco están las condiciones de seguridad para las y los usuarios: hace poco Nina Jane Patel, testeadora británica de Horizon Worlds, denunció en un blog que había sido “virtualmente violada en grupo” por múltiples avatares masculinos mientras jugaba en esta plataforma de realidad virtual en línea.
Aún no se ha lanzado esta plataforma de forma oficial y ya está dando que hablar.
Sin duda que debemos estar preparados para lo que se viene en esta nueva apuesta, que promete revolucionar la economía y las relaciones humanas tal como las hemos conocido.
Quizás, en un futuro próximo, ya no sea necesario viajar en tren para conocer otros lugares, porque todo estará a nuestra disposición en el Metaverso.
Y tú ¿Estás preparado/a para entrar a esta nueva realidad?