El debate ya comenzó: ¿Es la Inteligencia Artificial (IA) un peligro para la humanidad?
Si comprendemos que la IA tiene como objetivo la imitación del funcionamiento cognitivo del ser humano a través de la recopilación de datos a través de softwares informáticos, no nos quedan más opciones que celebrar los avances de la ciencia y sus beneficios, o estar alertas a lo que podría llevarnos la falta de regulación en esta materia.
¿Te enteraste de la huelga que el sindicato de guionistas de Hollywood está realizando desde hace varias semanas en Estados Unidos?
Para resumirlo, lo que están exigiendo los y las creadores a los estudios cinematográficos no son solo mejoras salariales que vienen arrastrándose por años, ahora se suman las garantías laborales que debieran otorgar las nuevas plataformas de “streaming” y, cómo no, el temor que les está generando ser reemplazados/as en sus labores por la Inteligencia Artificial a través de aplicaciones gratuitas como el ChatGPT.
Lo que estamos viviendo hoy es la revolución informática donde, tal como en la revolución industrial, la máquina automatizará de a poco las labores humanas dejando como únicos beneficiados a las empresas que disminuirían sus costos de producción.
Los avances de la tecnología son inevitables. No obstante, ya se están generando visiones críticas al respecto, como la que comenta Eric Heisserer, guionista de “A ciegas” (2018), película que fue un éxito en Netflix, quien enfatiza que “El arte no puede ser creado por una máquina. (Porque así) Perdemos el corazón y el alma de la historia…”.
¿Trabajos en riesgo?
Cuando OpenAI lanzó el ChatGPT, a fines del 2022, la Inteligencia Artificial se instaló en el inconsciente colectivo.
La gran novedad de poder realizar tareas habitualmente hechas por humanos, como escribir ensayos, discursos, currículums y poemas, todo en pocos minutos, sin duda que ha sido un gancho llamativo.
La vorágine informática no ha cesado y al poco tiempo surgieron otros sistemas similares, como el que lanzó Google: Bard, cuya descripción oficial destaca por ser “un colaborador creativo y útil para dar rienda suelta a tu imaginación, aumentar la productividad y dar vida a tus ideas”.
Estas aplicaciones aún están en período de perfeccionamiento de sus funcionalidades y se encuentran recopilando los datos que otorga Internet.
Tal cantidad de información es imposible de manejar para la mente humana, dejando en evidencia nuestra debilidad ante el desarrollo tecnológico y las posibles implicancias en las que podríamos vernos afectados/as en materia laboral.
Según un informe de Goldman Sachs, la IA podría reemplazar al equivalente a 300 millones de puestos de trabajo a tiempo completo.
Según el mismo estudio, el 46% de las tareas de profesiones administrativas y el 44% de las jurídicas podrían automatizarse, mientras que en el área de la construcción esto afectaría al 6% y en un 4% en el de mantenimiento.
Una encuesta realizada a 12.000 trabajadores de todo el mundo por Boston Consulting Group (BCG), dio a conocer un dato revelador: un tercio de los y las encuestados/as dijo estar preocupado/a de que AI los reemplace en el trabajo, preocupación que no afectaba a los gerentes.
No obstante, no todo es negativo, porque la IA bien regulada podría mejorar la productividad y crear nuevos puestos de trabajo.
Desde Beplan creemos que lo más sensato es informarse, conocer de cerca las nuevas tecnologías, e integrarlas de manera colaborativa a mejorar los diferentes trabajos de los equipos.
En resumen, trabajar con ellos y no contra ellos.
¿Y tú que piensa al respecto?